Participantes

Ignacio Correa

Antonio Hernández

Laura Martín

Silvia Nortes

Evelio Jimeno

Ludmila Pueblas

Xavier Martínez

Rocio López

Gema Maldonado

Desarrolladoras web

Leila Castillo

Cristina Fernández

Desirée García

Eva Millán

Blanca Sancho

Metodología

Para realizar este trabajo se usaron los datos del padrón continuo que ofrece el INE. Se analizaron por sexo y franjas de edad. Se puso mayor énfasis en las franjas entre 20 y 64 años por ser esta edad el período en el que las personas se dedican a desarrollarse laboralmente.

Se sumaron las personas comprendidas dentro de esta franja, tanto hombres como mujeres como ambos sexos juntos para calcular la disparidad entre ellos por municipio.

Después, hablamos con expertos para que nos dieran pistas sobre el cómo y el por qué del éxodo rural.

Mujeres que emprenden a pesar de las trabas

Las mujeres representan un porcentaje muy elevado de la fuerza laboral en determinados sectores como sanidad, educación o comercio al por menor, y los hombres ocupan la mayoría de los puestos de alta dirección y los trabajos manuales (Fuente: EPA)

Regina Monsalve cuidando de sus ovejas guirras

Leer Reportaje

Silvia Calaza
Foto: Funcionamiento sistema acuapónico. Cortesía Root and Fish
Galicia

Silvia es técnico superior en acuicultura, quedó finalista en el último concurso Desafío Mujer Rural del Instituto de la Mujer por su proyecto Root and Fish. Root and Fish desarrolla sistemas acuapónicos para promover una industria y una sociedad más sostenibles mediante la coproducción de alimentos y el aprovechamiento de espacio y residuos.

“Durante mi formación en el Instituto Gallego de Formación en Acuicultura (IGaFA) las mujeres éramos una minoría, creo que tal vez esto se deba a la cultura del país, a que se vea que para una mujer un trabajo en el mar es menos cómodo. Pienso que actualmente con los problemas de agua que hay en España y a nivel mundial, estos sistemas contribuyen a minimizar su gasto, porque obtienes dos producciones utilizando el mismo volumen de agua y sin perderla, la única pérdida de agua que hay es por evaporización, así que es una buena manera de utilizar los recursos hídricos.

En Galicia cada vez hay más emprendimiento, pero están más relacionados al sector tecnológico, en nuestro sector somos la excepción. El medio rural se basa en la industria cárnica y de la leche, el tema hortícola y de agricultura ecológica es todavía algo incipiente, hay iniciativas, pero no es lo que predomina. En general en este ámbito casi todos son hombres. Además, las familias mandan a los hijos a estudiar a Santiago, Vigo o La Coruña, y en temas que no tienen que ver con la agricultura, ni la acuicultura”.

Regina Monsalve

Comunidad Valenciana

Regina es ingeniera técnica agrónoma, ganó el premio excelencia a la innovación en la diversificación de la actividad económica en el medio rural de MAPAMA 2016, por su labor durante 20 años para recuperar la oveja guirra, autóctona de la Comunidad Valenciana. También está desarrollando investigaciones para la adaptabilidad y cultivo de la Stevia en la cuenca del Mediterráneo, así como ser la directora de I+D+i de la Finca del Rebolloso en la localidad de Ayora en la provincia de Valencia. Además de Presidenta del COITAVC, es miembro del Comité de Agricultura Ecológica (CAECV) y de la Asociación de Familias y Mujeres en el Medio Rural (AFAMMER).

“En los años noventa trabajaba en temas de subvenciones en diferentes administraciones, cuando tuve un accidente muy grave, me atropelló un tractor, estuve meses en coma. A partir de ese momento me replanteé mi vida, yo había estudiando por vocación, y no quería seguir detrás de un escritorio revisando papeles, quería emprender mis propios proyectos en el campo. Es así como empecé a buscar espacios a través de la custodia de territorio, un programa medioambiental en el que te ceden tierras para trabajar sosteniblemente y desarrollar tus proyectos, sin necesidad de adquirirlos como propios. Es un trabajo de economía social y colaborativa. Es difícil que en el medio rural te valoren, yo he vivido en zona rural de interior y de costa, con una media de 200 habitantes, y creo que esto se acentúa más en el interior. En la zona rural de levante, no tiene nada que ver, las mujeres se animan más a emprender En la Comunidad Valenciana se considera un plus y se fomentan las subvenciones para emprender en el medio rural. Puede ser que sea así porque aquí siempre ha habido consejeras en temas de agricultura”.

Isabel García
Foto: Isabel trabajando en su destilería. Cortesía Justina de Liébana
Cantabria

Isabel viene de una familia de orujeras, y de la herencia de su negocio familiar, la destilería ORULISA, ha sabido reinventarse y crear una marca de licores en honor a las mujeres de su familia, y en particular a su abuela Justina de Liébana.

“Yo veo el emprendimiento de las mujeres en el medio rural en Cantabria de manera optimista, es verdad que por ser mujeres en ciertos casos acarrea más dificultades, pero no siempre, todo depende del proyecto, de las ganas que tengas y de la actitud. En mi caso, quería desarrollar una marca que hiciera homenaje a las mujeres de mi familia, mi madre, mi tía, mi abuela, porque realmente la actividad de orujera viene de ellas de generaciones atrás. A cada producto le hemos puesto una frase de Justina, mi favorita es “detrás de todo gran orujo hay una gran mujer”, pero no porque sea el orujo, sino porque detrás de todas las grandes cosas, siempre hay grandes mujeres”.

Susanna Gordo
Foto: Lechugas de la huerta. Cortesía Masía Ana
Comunidad Valenciana

Susanna es ingeniero, y ejercía como técnico de calidad en el sector citrícola. Recibió el premio excelencia a la innovación en la actividad agraria de MAPAMA 2016, que le ha ayuda a impulsar más su huerta ecológica desarrollada en una finca familiar.

“Un sector como el nuestro que es la agricultura, es un sector eminentemente machista, pero en el momento en el que te especializas en la agricultura ecológica, parece que algo esté cambiando, que las mujeres tenemos un papel más importante, hay más iniciativas, y se nos valora más. La agricultura ecológica no es solo el sistema de producción, si no que es una filosofía de vida, es una forma también de conciliación familiar. Hoy en día sigue pasando que cuando la mujer tiene hijos se queda fuera del mercado laboral, y a lo mejor esto también supone una alternativa para que mujeres preparadas y con estudios puedan desarrollar una actividad en su zona o cerca de ella, así que creo que la agricultura ecológica va más allá de lo que podría ser la convencional”.

Victoria Tortosa
Foto: Victoria y Hugo. Cortesía La Exclusiva
Castilla y León

Victoria es licenciada en Comercio, Marketing y Antropología, y antes de iniciar su proyecto empresarial, trabajaba en cooperación internacional. El año pasado recibió el premio excelencia a la innovación en la diversificación de la actividad económica en el medio rural de MAPAMA por La Exclusiva, un negocio que ella denomina de logística social. Tiene dos sucursales, una en Soria, donde llegan a los 518 núcleos de población, y otra en Burgos donde llegan a 50 pueblos. La idea surgió cuando vieron que las tiendas que llevaba Hugo, su pareja, en diferentes pueblos, ya no eran sostenibles, y decidieron cerrar y cambiar el modelo de negocio. Así empezaron a hacer repartos de alimentación y después ampliaron a más servicios. “Para mí hay 3 causas principales de despoblación: la falta de servicios en el medio rural, de vivienda habilitada y de oportunidades de empleo. Desde La Exclusiva hemos intentado marcarnos esas causas como líneas de trabajo, hemos empezado con servicios, es decir alimentación, pero después hicimos un segundo estudio de mercado en 2014, y nos dimos cuenta que solo la alimentación no fija la población, así que ampliamos nuestros servicios, desde muebles, a revisión y optimización de la factura de la luz, y servicios jurídicos. Todo bajo el modelo de negocio de la exclusiva, es decir, cuestan lo mismo que si estuvieran en la capital, se le cobra un porcentaje del total de las ventas mensuales a los proveedores.

Hay poco emprendimiento de mujeres en el medio rural en Castilla y León, sin embargo creo que son clave. Además, no olvidemos que somos las que tenemos los niños. De hecho en La Exclusiva mis clientes son las abuelas, hay pocos abuelos que hagan la compra, siempre son ellas las que están en todo y las que organizan, además son súper emprendedoras, la que no tiene huerto de azafrán, cose, y la que no hace sus mermeladas, y tienen su propia comunidad. Esto de revertir la despoblación, es mucho trabajo, muy duro y difícil, pero yo creo firmemente que se puede hacer, y por eso sigo trabajando”.

Susana Blázquez
Foto: Huevos ecológicos. Cortesía El Kirinal Ecológico
Castilla La Mancha

Susana es licenciada en derecho, y en el 2012 decidió cambiar su vida y junto a su marido fundaron la granja de huevos ecológicos el Kirinal.

“Es un camino lleno de obstáculos ya que la administración y todos los procesos burocráticos no te lo ponen fácil, hay que tener mucha paciencia y ser muy valiente. Es por eso que creo que la gente no se anima a emprender más en medio rural porque no hay apoyo económico, ni por ministerios, ni por juntas, ni por mancomunidades. Inicié el proyecto porque creo que lo más importante es nuestra salud, y esa es la esencia del kirinal ecológico. Mis planes a corto plazo son diversificar productos según demanda, y además de los huevos, también hemos empezado con producción de aceite, así como almendras”.

Mar González
Foto: Proyecto "Costurízate". Cortesía Entre Todos
Castilla La Mancha

Mar decidió fundar junto a otras mujeres, Entre Todos, una asociación en la Sierra del Segura con el fin de aunar esfuerzos y mejorar la vida de sus pueblos. Gracias a uno de sus proyectos “Custorízate”, talleres de costura y aprendizaje para empoderar a las mujeres de estos pueblos, recibieron el premio de emprendimiento social de la Obra Social La Caixa.

“No hay una propuesta real de apoyo público al emprendimiento y desarrollo rural, pero ni aquí, no en ninguna otra comarca. Si las diferentes administraciones aunarán esfuerzos y dejaran de replicar patrones del medio urbano en el medio rural, seguramente se optimizarían más los recursos y obtendríamos mejores resultados”.

Inés Heredia
Foto: Inés tratando lana. Cortesía Feltai
Asturias

Inés es madrileña, antropóloga y terapeuta, hace cinco años decidió cambiar de vida y mudarse a Asturias para finalmente vivir en el campo. Tras ser madre, buscando material para ilustrar un libro infantil, descubrió el fieltro, y de ahí el mundo de la lana. Así nació el proyecto social Red de Lana, y posteriormente Feltai, por el que ya ha recibido el premio de la Obra Social La Caixa, así como el de Biocultura.

“Mi idea es encontrar el tripe balance, porque es una empresa con finalidad social, medioambiental y económica. Dentro de lo que es social, queremos dar formación a las mujeres del mundo rural para que aprovechen la lana y la laven, pero para hacer eso, hay que investigar antes, y hacer experimentos de prueba y error. También estamos preparando ferias y eventos, por ejemplo con otra mujer que trabaja en la Bretaña francesa con una oveja muy parecida a la nuestra, la xalda.

A través del proyecto de Red de Lana, me he encontrado con que en la mayoría de las regiones tiran la lana, porque no saben cómo tratarla, y tanto España como Europa, ha perdido la maquinaria necesaria para transformarla para cardarla y poderla hilar o trabajar fieltro. En general los apoyos tanto si eres hombre como si eres mujer, son poco reales, aquí tenemos los fondos líder, pero al final nadie que esté haciendo algo original los utiliza, porque son tantas pegas, que la gente al final no los pide. Creo que en el mundo rural, por suerte, cada vez hay más proyectos de mujeres, conozco varios muy interesantes, pero lleva años conseguir que se las visibilice, y por eso a lo mejor no se aprecia igual”.

El concepto de mujer rural en la actualidad, ya no es el que era, sin embargo sigue afectando y quedan muchas trabas para que se dé una igualdad. Según el decálogo de Benjamín García Sanz en Ruralidad Emergente, se suponía que:

- Tenía que casarse para asegurar su futuro, y la vida de la mujer estaba orientada a la procreación.

- Tenía la responsabilidad de cuidar de la casa y de todas las personas que vivían en ella.

- Existía la idea de que era autónoma, es decir, nadie le mandaba, pero carecía de tiempo libre para sus cosas. Incluso el domingo, día de ocio para los demás, tenía que dejar todo listo para el inicio de la semana.

- No tenía vida propia, su vida era la de los demás.

- No tenía programado tiempo libre, solo si el resto de sus tareas se lo permitía, entonces sí.

- No tenía presencia en la vida pública, por esa misma razón era impensable que pudiera ocupar ningún cargo público.

- Podía prolongar el espacio de la casa también a la iglesia.

- Contaba con una libertad programada y controlada, que si sobrepasaba suponía enfrentarse a la crítica y control social.

- Tenía poca formación, en las familias se solía invertir en educar a los hombres.

- Era la administradora de la economía familiar, aunque los gastos importantes, los decidía el marido.

Ahora sin embargo la mayoría de mujeres jóvenes tienen formación, de hecho según la Encuesta de Población Activa (EPA) del Instituto Nacional de Estadística (INE), en los últimos años, las diferencias en los niveles de educación de hombres y mujeres se han reducido considerablemente

las mujeres tienen en la actualidad niveles de educación más altos que los hombres, pero existe una clara disparidad entre el nivel de estudios que alcanzan las mujeres y sus situaciones profesionales y puestos laborales.

En las últimas décadas se ha producido un notable incremento en la participación de la mujer en el mercado de trabajo, pero una de las características de este mercado es la concentración de hombres y mujeres en diferentes sectores económicos y ocupaciones, así como las diferentes condiciones de trabajo por razón de género.

Existen factores condicionantes tanto por el lado de la demanda como de la oferta laboral, así como factores externos al mercado de trabajo, como los sociales y culturales, que determinan la segregación en diferentes sectores y ocupaciones de hombres y mujeres.

Según la EPA, las mujeres representan un porcentaje muy elevado de la fuerza laboral en determinados sectores como sanidad, educación o comercio al por menor, y los hombres ocupan la mayoría de los puestos de alta dirección y los trabajos manuales.

La Estrategia Europa 2020 y las políticas de empleo de los próximos años están dirigidas a promover la igualdad de género en el reparto del trabajo doméstico no remunerado, promover el espíritu empresarial y la actividad autónoma de las mujeres, evaluar las disparidades existentes en los permisos por motivos familiares, mejorar la calidad del trabajo a tiempo parcial y la retribución y categoría de los trabajos realizados principalmente por mujeres, así como conseguir mayor representación en puestos de cargos directivos. Según los datos de Womenalia, red profesional de mujeres, solo hay un 5% de mujeres en puestos de dirección general, 22% en puestos funcionales, y 16% en consejos de administración.

De hecho Beatriz de la Riva Secretaria de Confederación Española de Jóvenes Empresarios (CEAJE), afirma que tienen problemas para encontrar líderes empresarias, ya que solo el 5% de las sociedades limitadas de este país está constituida por mujeres.

"Fue en el 2015 cuando el Instituto Europeo de la Igualdad de Género becó el proyecto CoRSE (corresponsabilidad social como garantía del fomento del empleo femenino), desarrollado por la Federación de Empresarias y Directivas de Asturias, y que tiene el objetivo de identificar aquellos riesgos y barreras que asume la mujer al emprender en el medio rural en España.

Patricia Simón, la periodista encargada de documentar la historia de la vida de doce mujeres que emprendieron en el medio rural destaca varios obstáculos en los pueblos de la zona de Cantabria, Asturias y Castilla y León, que fue donde se centraron las entrevistas.

El principal problema serían las vías de comercialización, por la existencia de un monopolio de grandes productores que vulnera la situación de los pequeños negocios. También la falta de apoyo institucional, la falta de infraestructuras, de transporte público e internet, que dificulta mucho poder digitalizar los negocios y tener tiendas online.

“Muchas mujeres llevan solas la producción, no tienen tiempo ni de programar ni de proyectar estrategias a largo plazo, ni de pensar en otras dinámicas para mejorar el negocio”

De las doce mujeres, Patricia recuerda el caso del proyecto en Amayuelas, un pueblito de Palencia que había desaparecido y gracias a varios negocios entre ellos de mujeres, se ha convertido en un pueblo ecológico. “Es un proyecto de convivencia comunitario, que se podría exportar a cualquier lugar”.

“Pero sin duda la historia que me pareció más paradigmática, fue la de Pilar Quintana, empresaria y artesana, que fue víctima de violencia machista y ha salido adelante y se ha convertido en un referente del turismo rural, porque fue una de las primeras que montó una casa de turismo rural en España, y su historia es muy especial”.

Historias Proyecto CoRSE

Es importante destacar que la mujer juega un papel fundamental a la hora de revertir el proceso de despoblación en España “primero para atajar la fuerte masculinización y segundo para dotar de nueva energía demográfica a una sociedad rural fundamentalmente envejecida. Si no se da un equilibrio entre sexos, es imposible que haya pueblos y sociedad rural”, de acuerdo a Benjamín.

A pesar de que hay diversos premios, como el de Desafío Mujer Rural del Instituto de la Mujer, o los premios de excelencia a la innovación de Mujeres Rurales del Ministerio de Agricultura, Pesca, Alimentación y Medio Ambiente, las ayudas para mujeres rurales y emprendedoras no están sistematizadas. Existe un apoyo centralizado, el Programa de Apoyo Empresarial a las Mujeres (PAEM), pero es para mujeres emprendedoras en general, no para medio rural.

Parece que lo que afirma Benjamín en su estudio, “el mundo rural está abierto a la innovación y a la creatividad y la mujer debe ser una pieza clave en este proceso”, se está cumpliendo gracias a las mujeres que deciden formarse para mejorar negocios familiares, crear nuevos proyectos sociales y de colaboración, o buscar un modo de vida diferente en un entorno de mayor calidad, pero necesitan mucho más apoyo y personas en el medio rural que sean tan innovadoras y creativas como ellas.